Supongo que cuando uno está en una etapa donde no siente gran cosa por nadie, ni amor, ni rencor, ni dependencia, conectar con una canción de ruptura puede ser difícil. Es como cuando ves una película triste sin haber tenido un mal día: la entiendes, pero no la sientes. “Nunca sale el sol”, es el primer sencillo de Los Batz, un tema que marca una nueva etapa para la agrupación.
Los Batz son una agrupación colombiana de rock pop e indie pop antes conocidos con el nombre de Bat Habits. Con este sencillo inauguran una nueva etapa en su carrera: ahora cantan en español, estrenan identidad y buscan unir su catálogo pasado con esta nueva versión de sí mismos.
“Nunca sale el sol” es, en esencia, una canción de desamor con disfraz veraniego. Tiene ese aura de pop melancólico y a la vez empalagoso que dominó los 2010's, ese que uno escuchaba sin culpa en la radio o como banda sonora de alguna telenovela juvenil.
Pero eso no significa que sea una canción desechable. La batería es el instrumento más destacado del tema, marca con precisión un compás sencillo que no se rompe nunca, funcionando como un latido regular. Por otro lado, el bajo es discreto, pero firme, y la guitarra aporta capas atmosféricas. La voz no exagera ni dramatiza, simplemente flota, como si repitiera en loop un pensamiento que no se va. La producción, a cargo de la banda fue de la mano den Jack Gómez. La letra es directa, repetitiva y emocional, habla de un duelo interno que parece no avanzar, atrapado en la rutina de extrañar. Hay algo ingenuamente entrañable en la canción. No hay metáforas rebuscadas ni referencias a filosofías complejas. Solo hay una herida abierta.
Tal vez en este momento de mi vida no estoy en el estado emocional ideal para hacerle justicia a una canción así. Pero estoy seguro de que ha de haber alguien para quien “Nunca sale el sol” va a ser exactamente lo que necesita.
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